Según diversos estudios (Perspectivas económicas de América Latina en 2015, Informe de Competitividad Mundial para el año 2015 del World Economic Forum, Economy Weblog, etc ), en América Latina, la región continuará creciendo, no obstante, el ritmo de expansión económica será el modesto y uno de sus principales desafíos para los próximos año en todos los países de América Latina se centra en reconstruir la capacidad de respuesta monetaria y fiscal ante un escenario económico más adverso y de avanzar en el ámbito de las reformas estructurales para impulsar el crecimiento potencial con equidad, dentro de las cuales el fortalecimiento de la educación, las competencias y la innovación son clave.
Se espera que en América Latina se produzca un aumento del PIB del 2,2% en este año 2015, pero este crecimiento no será homogéneo. Algunos países tendrán importantes crecimientos económicos, como podrá suceder en Panamá (6,4%), Perú (5,1%), Colombia (4,5%), México (3,5%) o Chile (3,3%), mientras que otros continuarán con crecimientos económicos negativos: es el caso de Argentina (-1,5%) y Venezuela (-1%).
Esta dualidad de comportamiento en América Latina nos muestra, una vez más, que las economías se benefician cuando existe un buen nivel de seguridad jurídica y se siguen políticas económicas ortodoxas. Además el aumento de la inversión, tanto extranjera como nacional, favorece el avance de la tecnología y aporta nuevas habilidades organizativas que impulsan una mayor eficiencia económica.
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