La Oficina Española de Patentes y Marcas recibió el pasado año un total de 188 solicitudes de patente para registrar algún producto novedoso desde Galicia. Un total de 93 procedían de algún inventor de A Coruña, 75 de Pontevedra, Ourense registró 14 y Lugo, solo media docena.
La patente es un título que acredita el derecho a explotar en exclusiva el invento registrado durante un periodo de 20 años en el que el creador tiene todos los derechos sobre el artículo, lo que impide que terceras personas puedan fabricar, vender o utilizar el producto sin su consentimiento. Pero para poder patentar algo hay que cumplir con los requisitos de novedad y actividad inventiva, es decir, tiene que tratarse de algo totalmente novedoso en el mercado y que no resulte obvio para un experto en la materia.
Además, la legislación española solo permite patentar un procedimiento, un artículo, una máquina o un modo de fabricación, pero prohibe registrar como propiedad industrial las teorías científicas, la raza de un animal o patentes que vayan en contra del orden público.
Con estas premisas bajo el brazo, un total de 3.551 españoles reclamaron la autoría de alguna invención durante el pasado año, según los últimos datos de la Oficina de Patentes. Los más creativos fueron los madrileños (706 patentes); seguidos de catalanes (617) y andaluces (476).
El coste de solicitarla no rebasa los 900 euros y hay quien tras vender el invento a una multinacional o a otro país recibió un millón de euros a cambio.
Y para quienes no inventen algo totalmente novedoso, pero se les ocurra cómo mejorar algo que ya existe, están los modelos de utilidad. El proceso es similar al de una patente, pero el autor recibe los derechos de explotación solo por una década. Este título le permite explotar en exclusiva esa parte del invento aunque no la estética, algo que sí recogen las patentes. En este caso, Lugo es la provincia gallega en la que se solicitaron más modelo de utilidad: 77. A Coruña queda en segunda posición, con 65 solicitudes, seguida de Pontevedra ( 35) y Ourense (13).
Los expertos en patentes de la comunidad gallega aseguran que la mayor parte de las invenciones que se registran en Galicia son creadas por personas anónimas que no están vinculadas al mundo de la empresa.
La patente es un título que acredita el derecho a explotar en exclusiva el invento registrado durante un periodo de 20 años en el que el creador tiene todos los derechos sobre el artículo, lo que impide que terceras personas puedan fabricar, vender o utilizar el producto sin su consentimiento. Pero para poder patentar algo hay que cumplir con los requisitos de novedad y actividad inventiva, es decir, tiene que tratarse de algo totalmente novedoso en el mercado y que no resulte obvio para un experto en la materia.
Además, la legislación española solo permite patentar un procedimiento, un artículo, una máquina o un modo de fabricación, pero prohibe registrar como propiedad industrial las teorías científicas, la raza de un animal o patentes que vayan en contra del orden público.
Con estas premisas bajo el brazo, un total de 3.551 españoles reclamaron la autoría de alguna invención durante el pasado año, según los últimos datos de la Oficina de Patentes. Los más creativos fueron los madrileños (706 patentes); seguidos de catalanes (617) y andaluces (476).
El coste de solicitarla no rebasa los 900 euros y hay quien tras vender el invento a una multinacional o a otro país recibió un millón de euros a cambio.
Y para quienes no inventen algo totalmente novedoso, pero se les ocurra cómo mejorar algo que ya existe, están los modelos de utilidad. El proceso es similar al de una patente, pero el autor recibe los derechos de explotación solo por una década. Este título le permite explotar en exclusiva esa parte del invento aunque no la estética, algo que sí recogen las patentes. En este caso, Lugo es la provincia gallega en la que se solicitaron más modelo de utilidad: 77. A Coruña queda en segunda posición, con 65 solicitudes, seguida de Pontevedra ( 35) y Ourense (13).
Los expertos en patentes de la comunidad gallega aseguran que la mayor parte de las invenciones que se registran en Galicia son creadas por personas anónimas que no están vinculadas al mundo de la empresa.
Fuente: FARO DE VIGO 11/01/2012
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